Ascega Hoy

En el otoño de la vida

Y así se ha llegado a la edad que parecía tan lejana. Nuestros hábitos de vida cambian, nuestras responsabilidades son otras, nuestro cuerpo es diferente, pero te encuentras con que tus ideales son los mismos y la frustración primero y la rebeldía después te hacen volver del pesimismo en el que otros te han tratado de contagiar.

Vuelves la vista atrás y al hacer un resumen de aquellos tiempos vividos te preguntas si habrá valido la pena. Buscando la libertad en el camino te has encontrado con obstáculos en los que has dejado renuncias, tiempo y abandono de atenciones a los seres más queridos. Tiempo que con su transcurrir te conducían a nuevas y mejores etapas.

Y llegas a este otoño y analizas,  y al hacerlo te rebelas contra la injusticia, contra los engaños, y vuelves con el cansancio de los años, pero con el deber que tienes como ciudadano de un Estado de Derecho que dejará de serlo si no reaccionamos ante las falsas promesas y el desmantelamiento de todo aquello que creíamos era lo bueno, lo mejor, la reconciliación entre distintas formas de pensar y sentir.

Aquellos jóvenes, hoy con 45 años más a sus espaldas, observan con asombro, con pena, con dolor como aquellos valores se van perdiendo, convirtiendo lo logrado en una crítica destructiva por una razón: por el poder, sin importar ni la moral ni la ética, solo eso el mantenerse con su séquito y el de sus asesores en el conjunto de una sociedad distinta en la que todo vale y en la que todo se compre con el valor de unos pocos votos.

Por eso apoyaré desde la distancia una protesta ciudadana para tratar de reconducir la deriva de una forma de gobernar tan cambiante y variable en la que los valores ya no importan. En mis deseos estará el poder decir: VIVA LA DEMOCRACIA, que no es patrimonio de ningún partido político sino de todos los ciudadanos. Los que os votamos somos dueños de nuestros pensamientos y eso no podréis cambiarlos.

No pertenezco a partido político alguno, solo soy un ciudadano libre que como sea y en la medida que pueda lucharé por ti.

En el otoño, las hojas caen y los árboles cuidan sus fuerzas para resistir el invierno y dar paso a la primavera, pero en la primavera siguen siendo los mismos árboles…

Por Juan José Lojo Fandiño

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